Por lo que he ido observando a lo largo de toda la mañana, se trata de una preparación un tanto laboriosa. Así lo he podido comprobar cuando, entre subida y bajada al trastero con la esperanza de acondicionar nuevos huecos en tan minúsculo espacio, entraba en la cocina abducido por el olor que de aquí se desprendía. Freír láminas de berenjena, preparar el relleno, dos salsas a falta de una, enrollar las berenjenas con el relleno de longaniza... Enfín, que no es un plato para una prisa. Es un plato para entretener a una mañana dominical.
El esfuerzo y la dedicación han merecido la pena. Pleno de sabor, muy grato por cierto, y nada pesado. De hecho, me he comido cinco rollitos y no me siento nada empachado. Os dejo la receta por si os animáis ha hacerla.
Ingredientes para 4 personas:
Para los rollitos: 1 berenjena, harina, 2 huevos, aceite de oliva y sal.
Para el relleno de longaniza: 1 longaniza fresca de Graus, 1 cebolla, nata líquida, 50 gramos de harina, Oporto o vino blanco, sal y pimienta.
Para la salsa de trufas: 1 cebolla, 2 dientes de ajo, brandy o vino blanco, nata, mantequilla, trufa, sal y pimienta
Elaboración de los rollitos: Cortamos la berenjena en vertical en lonchas muy finas. Las espolvoreamos con sal y las pasamos por harina y huevo batido. Las freímos en aceite muy caliente y las escurrimos en papel absorbente.
Montaje del rollito: Extendemos la lámina de berenjena, depositamos sobre ella un poco del relleno de longaniza y enrollamos.
A la hora de servir, cubrimos el rollito con una de las salsas elaboradas.
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