BENDITO HUERTO
lunes, 13 de junio de 2022
01002 Añorados Bodegones
domingo, 12 de junio de 2022
01001 Los Huevos Poché con Gulas
FUENTE DE INSPIRACIÓN
sábado, 11 de junio de 2022
01000 Mil
DE DIEZ MIL COSAS
viernes, 10 de junio de 2022
00999 El Cocido Montañés
COCIDO CON FUNDAMENTO
En numerosas ocasiones he dejado constancia de mi gusto por
los platos de cuchara. El que traigo en esta ocasión a colación no lo he
elaborado nunca, pero lo he tomado siempre que he tenido oportunidad. Se trata
del cocido montañés, una receta típica de mi querida y tantas veces disfrutada
Cantabria. Es un plato de invierno, contundente y que se toma calentito. Ahora
que lo pienso, no es un plato para hablar de él, en el mes de junio y con 33
grados centígrados a las siete y media de la tarde, pero como este
caleidoscopio vital no entiende de distingos, y menos estacionales, aquí que lo
trae. A diferencia de otros cocidos que se elaboran en otras zonas geográficas
de España, el montañés se sirve en “un golpe”, es decir, todo en el mismo
plato, y está elaborado a base de alubias blancas, compango de la tierra
- chorizo, costilla, morcilla y unto- y berza.
De todos cuantos cocidos montañeses he probado en el valle
de Cabuérnaga, -al decir de los entendidos, zona del cocido montañés por excelencia-,
en la Vega de Pas, en Carmona o en el valle de Saja, por citar algunos
ejemplos, no sabría con cual quedarme. Me gustaría citar algunos de los
establecimientos en los que disfruté de este potente plato, pero por aquellos
años que ahora intento rememorar, todavía ni guardaba tarjetas ni tenía libro
de viajes ni apuntaba nada de nada. Me fiaba de mi cabeza, algo que la experiencia
me dice que no es en absoluto aconsejable.
Las fotografías que ilustran esta entrada se corresponden
con el último cocido montañés que tomé hace tres años. Fue en el Restaurante La
Ermita, en Puente de San Miguel, de viaje a Galicia. Me pareció muy sabroso y
menos contundente en relación a otros que recuerdo. (Por esas fechas tomaba ya
notas de todo lo que me gustaba para alimentar este blog)
Por cierto, cada primer domingo de septiembre, en la
localidad de Ucieda, se celebra la fiesta del cocido montañés, con más de 35
ediciones a sus espaldas.
miércoles, 8 de junio de 2022
00998 Sueños de Papel
IN MEMORIAM
00997 Las Tellinas
LAS "PIPAS" DEL MAR
lunes, 6 de junio de 2022
00996 Rosa Sola
LIBRE ROSA
00995 Las Tostadas de Aguacate
Y ALGO MÁS
Pasaron varios años sin que volviera a probarlo, por lo menos de forma consciente, hasta que conocí el guacamole, típica salsa mejicana en la que este exótico fruto tiene mucho que decir. A partir de aquí, no sé por qué, aunque imagino que atraído por sus extraordinarias propiedades alimenticias, comenzó a incorporarse a mi dieta diaria de forma espectacular. ¡Quién me lo iba a decir!
Tostadas y ensaladas acogen espléndidamente a tan singular fruta, aportando untuosidad y consistencia a muchas recetas. Un ejemplo es la que traigo en esta ocasión y que en casa acostumbramos a incluir en los aperitivos o "frugales" cenas. Basta con una rebanada de pan tostado, untada en tomate, y sobre él, unas rodajas de tomate, una buena anchoa del cantábrico, para finalizar con unas rodajas de aguacate. Chorrito de aceite, pizca de sal y a disfrutar del momento tostada.Las propiedades del aguacate son múltiples. Nutricionalmente, lo más curioso es que siendo una fruta fresca, su principal componente no son los hidratos de carbono, sino las grasas, las grasas del tipo más sano: las monoinsaturadas, como las del aceite de oliva. Además, el aguacate destaca sobre todo por su contenido en vitamina E, que protege la membrana de las células y su núcleo. También aporta vitamina C, provitamina A y minerales como el potasio, calcio, magnesio, fósforo, cobre, hierro y cinc.
Es recomendable para nuestra salud cardiovascular, relaja el sistema nervioso, ejerce un efecto protector de la visión y nutre y suaviza la piel.
El aguacate, toda una auténtica joyita.
sábado, 4 de junio de 2022
00994 El Real Monasterio de San Victorián
SAN BETURIÁN, EN EL SOBRARBE OSCENSE
Vuelve este caleidoscopio vital a recrear sus sentidos en el
Sobrarbe oscense. Y lo hace centrándose en todo un referente histórico de esta
comarca altoaragonesa como es el Real Monasterio de San Victorián o San
Beturián.
La primera vez que lo visité fue hace más de dos décadas.
Creo recordar que una parte de la propiedad del edificio se encontraba por
aquel entonces en manos privadas y sobre él prometían un interesante futuro. En
aquella ocasión solo pude “disfrutar” del exterior y del entorno donde se ubica
el cenobio. Por un buen puñado de razones, que no vienen al caso, guardo un
grato recuerdo de aquella visita.
Según cuenta la leyenda, “San Victorián llegó a los
Pirineos huyendo de las tentaciones terrenales. Tras una vida de eremita en la
Cueva de la Espelunga y realizando grandes prodigios, fue nombrado abad del
monasterio, que en un principio se llamó San Martín de Asán. Tiempo después, en
el siglo XI, el monasterio tomó su nombre pasándose a llamar de San Victorián o
San Beturián”.
Sería a finales del siglo XVI cuando comenzaría la
decadencia del cenobio tras la pérdida de propiedades por las políticas reales
y eclesiásticas, creándose el Obispado de Barbastro, pasando de controlar más
de 50 localidades a solo 20.
La economía del cenobio sobrarbense sufriría un nefasto golpe con la desamortización eclesial de Mendizábal, al perder gran parte de sus tierras. En 1844 estuvo previsto vender el monasterio pero se suspendió la venta por su valor histórico, según un Real Decreto, y San Victorián quedó encomendado al Ayuntamiento de Los Molinos.
La iglesia fue construida en el siglo XVII sobre una
anterior medieval. Presenta planta de cruz latina, de tres naves y cabecera
recta orientada al oeste, con capillas adosadas. En la del constado meridional
hay una cripta para enterramientos. En el costado sur se alza la torre con dos
cuerpos, rematados en un chapitel octogonal.
El claustro presenta tres galerías cubiertas con arcos de medio punto y
apuntados. En un dintel hay un pequeño relieve románico, enmarcado en una
mandorla, del siglo XII.
Desde aquella primera y ya lejana visita, muchas cosas han
cambiado en torno a esta histórica joya arquitectónica. Tras la compra por
parte del Gobierno de Aragón de la parte privada, hospedería y palacio abacial,
se consolidó todo el conjunto con el objetivo de detener el avance de la ruina.
Recientemente leí en un medio de comunicación que el Gobierno de Aragón invertirá un total de 670.000 euros hasta finales de 2023 en las obras de restauración y conservación del palacio abacial del monasterio. Cabe recordar que el Monasterio de San Victorián forma parte de la red de panteones reales impulsado por el Gobierno de Aragón, junto con los de San Pedro el Viejo de Huesca, San Juan de la Peña, Sijena y el Castillo de Montearagón.
Según se explicaba, el proyecto prevé la restauración y
consolidación del ala noroeste, con un avanzado estado de deterioro, el recalce
de la cimentación, la restauración de paramentos verticales, el arriostramiento
de los forjados y la sustitución de la cubierta.
El Monasterio de San Victorián, Bien de Interés
Cultural en la categoría de monumento desde marzo de 2002, constituye
un conjunto arquitectónico monacal del siglo XVI formado por
diferentes construcciones, ubicado en un lugar montañoso y aislado y rodeado
por un recinto amurallado.
El recinto del monasterio se compone de una Casa
Abadía, una Hospedería y dos construcciones rectangulares entre sí y
dispuestas en torno a un espacio abierto con una fuente y una cruz.
En el centro se dispone el claustro de la
comunidad, cuya crujía oriental es el único vestigio de la construcción
medieval sobre la que se levantó el nuevo monasterio.
Espero y deseo que este anuncio de inversiones en el Monasterio
de San Victorián sea una efectiva realidad a no mucho tardar y que no pase como
en tantas otras ocasiones, que solo sirva para regalar atractivos titulares a
los ojos del olvido.
Disfruté de la visita al cenobio sobrarbense, pero también tengo
que reconocer que me entristeció ver hasta qué punto se puede dejar al albur de
la desidia y de la falta de interés tan preciado patrimonio histórico y
cultural.
miércoles, 1 de junio de 2022
00993 La Ensalada de Sardinas
FUENTE DE SALUD