martes, 4 de julio de 2017

00507 Los Paraguayos

DONUT PEACH


Aunque no la consumo con asiduidad, creo que está en mi top ten de las frutas. Igual es por eso, porque la como al cabo del año en contadas ocasiones y cuando lo hago, disfruto lo que no está escrito. Esta mutación de melocotón no siempre la veo en mis  fruterías de costumbre en su justo momento. O está muy verde, con lo cual la descarto, o tan maduras que hay que consumirlas a la voz de ya. Esto y que el precio se viene un poco arriba. Los paraguayos que ilustran esta entrada estaban deliciosos, en su justa madurez. Se pelaban como cuando te quitas la piel en verano por tomar el sol de forma desmedida, crujiente la mordida y de dulce sabor. Vamos, un alborozo. Y hablo en pasado porque ya no quedan.

Desde pequeño siempre me llamó la atención el nombre que se le daba a esta fruta, además de su curiosa forma achatada. Y como niño que era, en un yo me lo guiso y yo me lo como,  pensé que sería porque venía de Paraguay. He intentado ahora dar respuesta a la pregunta pero no ha habido forma de encontrarla. No he dado con  referencia alguna. Sí, en cambio, me he topado con curiosos apuntes desconocidos por mí.

Por ejemplo, que el paraguayo, también conocido como paraguaya, proviene de China, aunque también hay quien afirma que su origen se encuentra en la antigua Persia. Fuera de nuestras fronteras adquiere los nombres de pan tao, donut peach, saturn peach, saucer peaches, peento peaches o chinese flat peach.

Lo definen como el hermano gemelo de la nectarina y presenta unas características nutricionales similares a las del melocotón. Aportan grandes cantidades de agua y antioxidantes que le confieren un efecto anticancerígeno. Es rico en carótenos y vitaminas C, A, B1, B2 y B6, y contiene minerales tales como el potasio, fósforo, magnesio, azufre, hierro y calcio. Además, gracias a su contenido en fibra dietética, ayuda a regular el tránsito intestinal y a evitar el estreñimiento.

Ah! Y me encanta el olor que deja el paraguayo en mis dedos antes de lavarlos. Huelen a verano después de cenar.





No hay comentarios:

Publicar un comentario