jueves, 25 de mayo de 2023

01125 Las Tortas de Aceite

SEVILLANAS


Cuando visito un lugar, pueblo o ciudad, me gusta dejarme llevar por sus productos típicos. Abrir mis sentidos a nuevos gustos y probar el resultado de otras formas de cocinar. Salvo alguna contadísima excepción, la experiencia hasta la fecha es deliciosa y enriquecedora.

Un ejemplo de lo dicho son las tortas de aceite sevillanas. Hasta que supe de su existencia, había probado otras variedades de origen bien distinto. Al fin y a la postre, una torta de aceite no es otra cosa que una elaboración de panadería o repostería, con forma de torta, plana y redonda, que se cubre con aceite de oliva. Y a partir de aquí, la tradición popular del lugar, introducirá condimentos e ingredientes que marcarán su distingo con respecto al resto.

Las tortas de aceite sevillanas las conocí hace unos diez años en mi primera incursión real a la sorprendente Andalucía. Fue en tierras onubenses, donde pasamos unas familiares vacaciones veraniegas. No recuerdo con exactitud cómo llegaron al apartamento. Supongo que las veríamos en algún supermercado, nos harían gracia y acabaríamos comprándolas. De lo que sí me acuerdo a la perfección, es del grato sabor que me dejó la primera que probé: crujiente, dulce, suave y anisada. Y que no comí solo una, sino tres. Huelga decir que, a partir de ese día, las tortas pasaron a convertirse en algo habitual en nuestra cesta de la compra vacacional. Incluso nos trajimos un par de paquetes al regreso de las vacaciones.

Ya en casa, ¡Oh, sorpresa!, un día haciendo la compra, pudimos comprobar que en un supermercado se exhibían en sus estanterías, para nuestra perdición, estas tortas de aceite. No diré, mentiría, que siempre las tenemos presentes, pero sí que son motivo de algún capricho que otro. Como anécdota, en mi último cumpleaños no hubo tarta de celebración, sino tortas de aceite sevillanas, acompañadas de unas bolas de helado de stracciatella. Otra de mis múltiples debilidades.

Abundando en este dulce manjar, diré que estas tortas son típicas de la localidad sevillana de Castilleja de la Cuesta, donde se elaboran desde el siglo XIX. Se dice que «fueron Inés Rosales y Concepción Cansino las pioneras en la fabricación de estas tortas, que se llevaban en canastos para venderlas en Castilleja y en Sevilla, y pronto surgieron otros obradores dedicados a su elaboración». Estas tortas están protegidas por la denominación Especialidad Tradicional Garantizada de la Unión Europea. Las tortas de aceite de Inés Rosales son las más populares, si bien hay otras casas que las producen. Aunque la torta más popular y consumida es la de aceite y anís, también se comercializan de naranja, de romero y tomillo, de canela, de sésamo y sal marina, y sin azúcar.

Si te animas a elaborarlas en casa, aquí va la receta.

Ingredientes: 100 gramos de aceite de oliva virgen extra, 15 gramos de anís en grano, 140 gramos de agua, 360 gramos de harina de fuerza, 20 gramos de levadura fresca, 40 ml de anís dulce de licor, 20 gramos de semillas de sésamo, 60 gramos de azúcar, ralladura de limón, media cucharada de sal y azúcar para espolvorear.

Elaboración: Poner en un recipiente el aceite, la ralladura de limón, el anís en grano y calentar al microondas durante 45 segundos, con el fin de que se caliente el aceite y se infusionen los sabores, pero sin que se fría el aceite. A continuación, poner en un bol la harina tamizada y disolver la levadura en un vaso de agua tibia. Una vez disuelta, añadir el licor de anís, el aceite infusionado con la ralladura de limón y el anís en grano, el azúcar, la sal y el sésamo. Mezclar todo bien. Hacer un volcán con la harina y añadir todos los líquidos. Mezclar y amasar. Formar una bola, tapar con un trapo y dejar fermentar hasta que doble su volumen. Hacer bolas de unos 50 gramos cada una. Aplastar cada bola con la palma de la mano y estirar con un rodillo hasta dejar la masa lo más fina posible, procurando darle una forma redondeada. Colocar las tortas sobre bandejas de horno, cubiertas con papel sulfurizado, y espolvorear cada torta con azúcar. Pre calentar el horno a 220 grados centígrados e introducir las tortas durante 6/7 minutos o hasta que comiencen a tomar color. Dejar enfriar y consumir.

 




2 comentarios:

  1. Hoy buscando en mi agenda he visto tu nombre y he investigado si todavía tenías ese blog que con tanto cariño comenzaste hace unos años, no he tardado en encontrarlo y cuál ha sido mi alegría que veo que sigues completando tu obra en la que destaca tu excelente redacción. Gracias por no desanimarte y seguir con este fantástico blog. Un fuerte abrazo

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  2. Ohhhh! Muchísimas gracias, Luis. No sabes cómo agradezco tus amables palabras. Pues sí, aunque a rachas, todavía sigo con él. Últimamente, me obligo a escribir una entrada todos los días. Soy consciente de que no lograré escribir sobre diez mil cosas que me gustan, pero intentaré acercarme a ellas lo máximo posible. Comentarios como el tuyo me obligan a seguir hacia adelante, me inyectan ilusión y cargan las pilas. Un abrazo

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