lunes, 30 de diciembre de 2024

01560 Aunque Me Repita

 PLATAZO COMBINADO


Puede que me repita, pero es que los platos combinados dan mucho juego. Además de salvar muchas comidas y cenas, de presentar en un solo plato un buen número de sabores y de alegrar la vista, son una magnífica alternativa para hacer desaparecer del frigorífico, los restos de alimentos que se van amontonando. 

Reconozco que soy un fan de los platos combinados y defensor a ultranza del aprovechamiento de los alimentos. Ya he repetido en numerosas ocasiones en este caleidoscopio vital, que en la cocina de casa "no se tira nada y se aprovecha todo", siguiendo las enseñanzas en las que fui educado. 

No siempre se consiguen platos de esos que dejan recuerdo y que, incluso, tomas nota para elaborarlo ex profeso y sin tener que esperar a que se vuelva a repetir la misma circunstancia. Todo depende de los mimbres con los que se cuente en cada momento.

En esta ocasión, las sobras con las que se elaboró este "platazo combinado" eran un cheque al portador. No podía fallar: tortilla de patata, anchoas albardadas, langostinos cocidos y lechuga. Salvo el vegetal, el resto de alimentos procedían de restos y sobras de precedentes comidas. Poco más puedo añadir al respecto. Lo disfruté a rabiar, tanto que me supo a poco. Y para que no se me olvide, lo traslado hasta aquí.

Me he dado cuenta de que son muchos ya los platos combinados que forman parte de este caleidoscopio vital, y en versiones bien distintas, pero es que así se escriben mis días.  





No hay comentarios:

Publicar un comentario