COLOR
Que tu hermoso oficio,
ideal necesario,
reinvente los remedios
en las noches de luna
y días de espuma.
Emoción y admiración imprecisa,
súbita caricia
para los pensamientos sin sincronía.
Fuerza inusitada,
audaz armonía,
derroche quimérico
a la atención debida.
No, no te vayas todavía.
Preciso tu presencia
como sutil melodía
en estación otoñal.
Permanece clavado
en mis pupilas de agua y arena,
hasta que mis pies de escarcha
se vistan de mar.
Color,
no te vayas todavía,
que queda mucho por soñar.
No hay comentarios:
Publicar un comentario