viernes, 11 de julio de 2025

01691 Necesitada Renovación

 PENSAMIENTOS A LA FUGA


Se han ido. No han pedido permiso. Simplemente, se han marchado. Hoy, mis pensamientos me han abandonado. No me han comunicado su destino. Espero que allá donde fueren, regresen renovados. 


martes, 8 de julio de 2025

01690 Paisajes Escritos 13

SIERRAS ESCONDIDAS


Sierras escondidas al amparo de bravías cordilleras kársticas. Bosques de hondo latido y ardiente oscuridad. 

Óleo sobre lienzo de Fernando Herce.
Texto de Antonio Herce
Exposición: Paisajes Escritos. Huesca, junio de 2015



lunes, 7 de julio de 2025

01689 Esta Vez Elijo Yo

 PARA VARIAR


¿Quedamos?

¿Dónde siempre?

No. Esta vez elijo yo.

Nos vemos en cualquier lugar 

en el que el color se haga costumbre.



miércoles, 2 de julio de 2025

01688 Una Pequeña Lección de Vida

 PACIENCIA Y ESPERANZA


Una nueva lección de la Naturaleza. Cuando planté, allá por mayo, estas plantas de berenjena, a los pocos días comenzaron a perder su lozanía. Estuve a punto de arrancarlas y poner otras nuevas. Pero algo me dijo, “espera”. Y así lo hice. De estar tumbadas en la tierra con apenas dos o tres hojas, comenzaron a erguirse y a mostrar su verdor. Hoy, respiran vida al amparo de la Naturaleza y sus ganas de ser y existir. Hoy, he recordado una de las sencillas reglas de la vida; paciencia y esperanza.


01687 Otra Vez el Mar y Yo

 ¡QUÉ GUAY!


Escucho a mi lado la voz de un niño decir ¡el mar, qué guay!  Y yo digo en voz queda, ¡sí, que guay!

Miro a mi alrededor y no veo a nadie. Solo estamos el mar y yo.


martes, 1 de julio de 2025

01686 No Siempre Resulta Fácil

 SONREÍR


No siempre resulta fácil sonreír. A veces cuesta esfuerzo. Sobre todo en esos días en los que no pasa nada y sucede de todo. Es entonces, cuando la naturaleza sala tu paso para sacarte la sonrisa que pensabas haber dejado en casa. Por algo dicen que es sabia. También por estas pequeñas cosas.

lunes, 30 de junio de 2025

01685 Así Tendría Que Ser

 UN AGRADECIMIENTO Y UN PERDÓN


He perdido la mirada en un punto anclado en un silencioso cielo de atardecida. Contagiado por el mutismo del momento, hasta mis pensamientos han querido respetar tan amable y necesitado sosiego. Todos, menos uno. Aquel que me ha recordado que en cada día cabe, por lo menos, un agradecimiento y un perdón.