martes, 16 de agosto de 2022

01029 Las Berenjenas al Minuto

 PARA CORREGIR LOS EXCESOS


Se acabaron los excesos laurentinos. Esta mañana, al despertar, me dolía hasta el blanco del ojo. Y tampoco es que haya hecho grandes barbaridades durante estos días. Uno ya no tiene edad. Pero con todo, alguna que otra cerveza, también un par de combinados y alguna que otra opípara comida han caído durante esta larga semana festiva oscense.

He estado tentado de subirme a la báscula, pero me lo he pensado mejor. Para qué darme un disgusto innecesario. Si lo veo y me lo noto. No me hace falta este notario con dígitos.

Así las cosas, lo mejor es poner remedio cuanto antes y sin obsesión alguna. Para ello, voy a tirar de mi recetario de "puesta a punto", pero sin agobios. Aprovechando que estamos en temporada de la deliciosa berenjena, y que me encanta de cualquier manera, comenzaré por "cocinar" unas berenjenas al minuto. Bueno, en realidad son entre siete y doce minutos lo que se tarda en elaborarlas, pero se me antoja más rotundo decir "al minuto" que, "berenjenas a los siete o doce minutos". También podría haber encabezado la receta diciendo "berenjenas rápidas al microondas", pero me parecía poco glamuroso. 

La receta en cuestión es super sencilla. Solo se necesitan unas buenas berenjenas, ajos, unas gotas de aceite, sal y pimienta molida. Una vez bien lavadas las berenjenas, les quitamos el tallo y las cortamos longitudinalmente. En la parte carnosa de las hortalizas le practicamos unos cortes transversales, de izquierda a derecha, y viceversa. Cortamos unos dientes de ajo en finas láminas que vamos introduciendo en algunos de los cortes practicados en las berenjenas. Hecha esta operación, rociamos con un poco de aceite cada berenjena y sazonamos al gusto. Introducimos las berenjenas en el microondas. Como el tiempo a utilizar en cada electrodoméstico está en función de la potencia y las berenjenas dependen de su estado de madurez, no me atrevo a decir cuántos minutos tienen que estar. Yo las dejo entre siete y doce minutos. Para saber si están cocinadas, lo mejor es pincharlas con un tenedor y comprobar el estado de la carne de la berenjena. Cuando veamos que están listas, y a la hora de sacarlas a la mesa, les espolvoreamos un poco de pimienta negra o blanca, o sendas. También existe la versión horno, que es lo mismo, pero con más inversión de tiempo.

Resultan muy agradables de comer, son sabrosas y bajas en calorías e hidratos de carbono. Con estas berenjenas doy por inaugurada la operación excesos. 






No hay comentarios:

Publicar un comentario