sábado, 13 de mayo de 2023

01115 Las Salchichas con Salsa de Tomate Casero y Noodles

PLATO ÚNICO


Últimamente me estoy aficionando a los platos únicos. Desconozco el motivo, aunque posiblemente no lo haya. Me imagino que será una racha, como cuando me da por una fijación cualquiera. Ya pasará.

Esta situación coincide con mi enésimo desencuentro con el pan de mis amores y también de mis temores. Así, que la cosa se complica. Pero que no cunda el pánico, que en la cocina hay solución para todo.

                                                                                    El caso es que me apetecía para comer unas deliciosas salchichas de cerdo especiadas, bañadas en una de mis salsas favoritas; la de tomate casera, y que quedó ya registrada en este caleidoscopio vital, en la entrada 00919. Pero tratándose de salsa y de buena salsa, sin pan, mala cosa es. Por un momento, he estado tentado de hacer una excepción, pero no, he preferido buscar una alternativa. La primera opción ha sido un simple arroz blanco hervido; absorbe bien y con las salchichas se lleva divinamente. Cuando he ido a buscar a la despensa el paquete de arroz, mis ojos se han topado con unos sobres de noodles, finos fideos chinos, también de arroz. Y he vuelto a pensar. ¿Y por qué no?

Así, que me he puesto manos a la obra. He frito las siempre riquísimas y tentadoras salchichas de carne de cerdo, para a continuación elaborar la salsa de tomate. Aquí copio y pego lo que en su día escribí: "Su elaboración es muy sencilla. En una sartén se pone a calentar aceite de oliva virgen. Cuando esté caliente, incorporamos el tomate cortado a trozos. Una vez veamos que el tomate comienza a desprenderse del agua y empieza a hervir, incorporamos la cebolla, el pimiento, el ajo, la sal y la pizca de azúcar. Dejamos cocer todo hasta que todos los ingredientes los veamos ya cocinados. Solo restará triturar la salsa ayudados de un brazo de cocina y pasarla por un chino para que nos quede limpia de "tropezones".

La salsa podemos envasarla y conservarla en el frigorífico. Aguanta bien varios días. Bueno, la verdad es que no sé muy bien cuántos, pues en cuanto dejo el bote en el frigorífico, apenas le da tiempo a acomodarse en él".

Una vez obtenida la salsa, la he incorporado a una sartén grande y añadido las salchichas para cocinarlas a fuego alto durante unos cinco minutos. Mientras tanto, he puesto en agua hirviendo los noodles durante otros cinco minutos, los he escurrido bien y los he ido depositando en los platos ya servidos de salchichas con tomate.

Tengo que confesar que tenía alguna duda al principio, pero finalmente los noodles me han convencido, cumpliendo su función de impregnarse con la salsa de tomate y dejar el plato limpio. No aportan sabor, pero me han ahorrado, por lo menos, media barra de pan. Lo cual es de agradecer. ¡Por Dios!













No hay comentarios:

Publicar un comentario