miércoles, 20 de junio de 2018

00729 Las Raciones

POR EJEMPLO, DE BACALAO


A caballo entre la tapa y el plato de comensal se podría ubicar la ración. He intentado averiguar algo al respecto de ella, pero finalmente lo he dejado por imposible. Muchas opiniones, algunas enfrentadas y hasta viscerales, para al final, nada de nada. Que si la tapa, que si el pincho, que si la media ración, que si ración de gambas, que si media de calamares... un follón. Así, que puestos a dejar una impronta, me atreveré a exponer mi concepto de ración y su encanto.

Como digo, sitúo a lo que entiendo por ración, a esa porción de alimento, más "contundente" que una tapa y anticipo de lo que puede ser un plato de carta o menú. Una ración, a diferencia de la tapa, permite otras técnicas de elaboración que las tapas e incluso admite salsas que las otras, sobre el papel, no debieran.

Las raciones, a diferencia de los montaditos, no van sobre pan; el pan, en todo caso acompaña. Y a diferencia de montatidos y tapas, no están para pasar o acompañar al vino, caña o aperitivo, sino que, por el contrario, se necesita a la caña, aperitivo o vino para acompañarla.

Toda esta perorata, perfectamente discutible,  para acompañar la imagen de este magnífico bacalao sobre una cama de pimientos asados y una mousse de ajoaceite que está para llorar. Además, muy ilustrativa para diferenciar lo que es una tapa, un pincho, un montadito, una ración y un plato. Da igual, solo sé que está de vicio.


No hay comentarios:

Publicar un comentario